Volver
enero 12, 2021

“La estrategia de algunos es minimizar a la industria pesquera o eliminarla”

Marcel Moenne, gerente general de Pacific Blu, se refirió al proyecto que busca eliminar el arrastre como forma de captura para la merluza. 

Por Javier Martínez     jmartinez@trade-news.cl

Primero fue la ley de la jibia, que establece que sólo puede ser capturada por la línea de mano o mediante el sistema de pesca artesanal o la pesca portera. La normativa dejó a miles de personas sin empleo luego de que varias plantas cerraran sus áreas proceso, sobre todo en la Región del Biobío.

  Ahora se viene otro proyecto que podría tener las mismas consecuencias, luego que la comisión de Pesca, Acuicultura e Intereses Marítimos aprobó el proyecto llamado “Ley de la Merluza”, que busca establecer un mecanismo regulatorio para promover la sustentabilidad de los recursos hidrobiológicos y cumplir el mandato precautorio de la Ley General de Pesca.


LA INICIATIVA CONSISTE EN LA PROHIBICIÓN DEL EMPLEO DE ARTES DE PESCA DENOMINADOS COMO «ARRASTRE», YA SEA DE FONDO O MEDIA AGUA, TANTO PARA EL SECTOR INDUSTRIAL O ARTESANAL.


  Sin duda que esto mantiene en alerta al sector, sobre todo el industrial, que ve con preocupación que esta ley prospere, pues implicaría el cierre total de plantas. Tal sería el caso de Pacific Blu, que concentra su tarea en la merluza, la cual incluso exporta a mercados internacionales. Si esta normativa se aprueba en el Congreso, esta empresa, con asiento en Talcahuano, se vería obligada a cerrar y despedir a más de 1.000 personas.

  Así lo hizo ver Marcel Moenne, gerente general de la compañía, quien comentó a TradeNews.cl lo delicado de este escenario.

– ¿Por qué cree que esta ley ha pasado, por decirlo así, los filtros legislativos si a todas luces, según muchos, no tiene base científica?

-Ha quedado en evidencia que algunos parlamentarios repiten consignas falsas solo para justificar una decisión que tienen preestablecidas y que no están dispuestos a cambiar, aunque se les muestre toda la evidencia científica que existe y que es independiente y pública y eso es lamentable,                                               porque justamente una de las etapas más importantes del trámite legislativo como son las audiencias públicas deja de tener sentido. Por otro lado, algunos congresistas votan pensando en sus electores y se olvidan del bien común, entonces les da lo mismo lo que ocurre 500 kilómetros más al sur en una ciudad como Talcahuano, en donde más de 1.000 personas podrían perder su fuente laboral sin ninguna justificación.

-¿Cree que existen parlamentarios que quieren eliminar a la industria o las empresas pesqueras?

-Cuando se aprobó la ley de la jibia algunos parlamentarios dijeron que esa ley era solo el comienzo y no me cabe duda de que la estrategia de algunos es justamente ir avanzando en minimizar a la industria pesquera o derechamente eliminarla porque de sustentabilidad esto no tiene nada. Lo que estamos viendo es una forma de eliminar paulatinamente a la pesca industrial y el Gobierno parece ser un mero observador de todo esto porque hasta la fecha ha tomado palco. El impacto es social, económico, pero también se está tirando por la borda décadas de investigación y desarrollo de productos y nuevos formatos de alimentación para los chilenos que hoy se venden de manera masiva en supermercados y almacenes de barrios. Es muy triste lo que ocurre. 

-Si este proyecto llegara a ser ley ¿Pacific Blu desaparece como tal o quedaría alguna opción productiva?

-No existe ninguna otra especie que podamos pescar para mantener la flota y la planta de congelados en operación. Se acabaría Pacific Blu como empresa pesquera y procesadora de productos del mar. Es nuestra realidad y hemos sido muy claros con decírselo al Gobierno, los parlamentarios y nuestros trabajadores que viven semanas de angustias e incertidumbre. 

-¿Qué pasa con los parlamentarios de la zona?, ¿Falta defensa de los puestos laborales?

-A diferencia de lo ocurrido con la jibia, esta vez los parlamentarios de la zona de manera transversal se han dado cuenta que eliminar el arte de arrastre en la merluza sólo perjudica a la Región del Biobío y está lejos de ser una medida que persiga la sustentabilidad de la actividad. Esperamos que se involucren más actores públicos y privados en esto, porque finalmente es nuestra Región y su gente la que está sufriendo las consecuencias de decisiones que se están tomando en el parlamento de manera irresponsable.

-Hace dos semanas se incautaron en el sur del país dos toneladas de merluza ilegal. ¿Qué piensa usted al respecto?

-La pesca ilegal es la principal amenaza que tiene la merluza común hoy en día y así lo dicen también todos los organismos del Estado, la comunidad científica y algunas ONG responsables y serias. Si la cuota de la merluza es de 38.000 toneladas y se termina capturando el doble en una zona del país como las costas del Maule es evidente que estamos frente a un problema mayor y por lo mismo en el Comité de Manejo así sale reflejado como prioridad y principal causa de la no recuperación de la especie. Como empresa siempre hemos estado disponibles para construir una solución a este drama. Los pescadores del Maule están capturados por mafias que operan como intermediarios en donde les pagan una miseria por una caja de merluza y que terminan vendiendo en el mercado informal en todo Chile perjudicando a todo el sector y nadie hace nada. 

-¿Qué le parece la opinión del presidente de Ferepa Biobío, Hugo Arancibia Zamorano, quien dijo que «el arrastre se debe eliminar para todos los recursos, ya que no tiene sustento ambiental»?

-Me sorprendieron sus declaraciones, pero creo que habla desde el desconocimiento. La realidad que él describe es total y absolutamente distinta. Me quedo con la relación que hemos forjado con pescadores merluceros de la Región del Biobío y de otras regiones del país y que entienden perfectamente el problema y comparten la idea de administración y manejo sostenible de la merluza común con nosotros.